Erasmus FP en Portugal
Estamos sanos y salvos.
Primera semana en Lisboa
ERASMUS 2025. El pasado mes de enero nos comunicaron que habíamos sido los elegidos para ir a Lisboa a realizar nuestras prácticas FCT, gracias a una beca Erasmus. Dos meses para aprender, formarnos y descubrir la vida portuguesa a través de la capital lusa.
Tras la cancelación de nuestro primer vuelo, el pasado martes llegamos al aeropuerto de Valencia, preparados para volar. No fue poca nuestra sorpresa cuando Ismael se acercó a preguntar en la sala VIP del aeropuerto si era posible entrar, y, sin saber muy bien por qué, resultó que nuestro billete era clase business y nos otorgaba acceso gratuito.
Para colmo, nos retrasaron el vuelo una hora, pero dentro de la sala VIP teníamos acceso a una amplia gama de aperitivos y bebidas para nuestro disfrute: jamón, quesos, bollería, refrescos e incluso champán. Tras este inesperado convite, y con cierta pena por dejar la sala, embarcamos a las 19:30 y volamos hasta Lisboa en primera clase, con su respectiva merienda incluida.
Aterrizamos a las 20:30 y nos reunimos con Mario, un simpático señor portugués que hizo de taxista y nos llevó en furgoneta hasta nuestro piso en Montijo. Allí nos esperaba Verónica, la responsable de la agencia, quien nos enseñó el piso, repartió las tarjetas de transporte y nos acompañó a dar una vuelta por Montijo para conocer el lugar y marcar el punto de encuentro desde donde, al día siguiente, partiríamos para conocer nuestras empresas.
El miércoles cada uno fue a su empresa, tras las presentaciones, nos enseñaron el trabajo que realizaremos y nuestras funciones durante los próximos dos meses. Algunos están trabajando en Montijo, otros en Lisboa capital y otros en Barreiro, un pueblecito cercano. Gracias a las tarjetas de transporte podemos movernos libremente por toda Lisboa, y aunque algunos trayectos duran más de una hora, se hacen amenos observando la vida y cultura local.
Sin darnos cuenta llegó el fin de semana, y con dos días libres nos lanzamos a descubrir Lisboa. El sábado fuimos a caminar por la ciudad y visitamos los lugares más emblemáticos: la Catedral de Lisboa, la Plaza del Comercio y el Mirador de San Pedro. Por la tarde, cansados de tantas cuestas, decidimos descubrir la zona de fiesta —que para algo estamos de Erasmus—. Bairro Alto y la calle Rosa nos encantaron: todo muy colorido, lleno de pubs y, por supuesto, con mucha gente. Conocimos a muchos otros Erasmus, e incluso a un grupo de Albacete.
El domingo por la tarde, tras descansar de la noche portuguesa, decidimos ir a Sintra, una región cercana a Lisboa donde se encuentra el Parque Natural de Sintra-Cascais. Allí disfrutamos del Palacio de Monserrate, una especie de Alcázar portugués, rodeado de vegetación y con espectaculares salas ceremoniales.
Para ser nuestra primera semana, ha sido intensa. Nos hemos estado adaptando a un nuevo lugar y estilo de vida, aprendiendo a valernos por nosotros mismos y, al mismo tiempo, disfrutando al máximo de esta experiencia. Os adjuntamos algunas fotos de todo lo acontecido.
